El próximo domingo 7 de agosto se estrenará por las pantallas de Chilevisión la cuarta temporada de “El Discípulo del Chef”. Es por ello que el pasado martes en las dependencias de la estación privada se realizó el lanzamiento de esta nueva etapa, instancia en la que Fotech.cl habló en exclusiva con la chef líder del equipo azul.
Esta es la tercera temporada en la que Carolina «China» Bazán participa junto a Sergi Arola y Ennio Carota como guía. En ese contexto, la experta culinaria se sinceró con respecto a las razones que la motivaron a ser parte de un programa televisivo y las consecuencias de la repentina fama.
«Estábamos en plena pandemia, me llamaron para esto (…) dije ‘Ya, voy a probar y si eme gusta bien, y si no me gusta, no pierdo nada’, y lo hice», indicó, acotando que por ese entonces la llamaron para «MasterChef Chile», «pero creo que no estaba preparada, no me atreví a hacerlo», explicó.
En ese contexto, cuando terminó la primera temporada, se vio rápidamente involucrada en la segunda. «Ni siquiera me preguntaron si quería estar en otra. Fue como ‘ya, vamos a hacer otra’; y yo: ‘pero es que yo tengo una vida, tengo un restaurant, dos de hecho y ahora se suma otro’… Pero bueno, una cosa lleva a la otra y como que ahí vas manejando tus tiempos. Es entretenido, porque se va abriendo el abanico. No me dieron opción», acotó entre risas.
Sin embargo, expuso que en realidad se quedó en el espacio porque está a gusto con sus compañeros de trabajo. «Desde el día uno me sentí muy cómoda con el equipo, con el trabajo. Es que en el fondo es lo mismo que yo hago en un restaurant, liderar un equipo, no es tan distinto», reconoció.
Asimismo, por la fama que adquirió gracias al programa, sostiene que intenta no pensar en ello. «Como que no lo computo quizá, prefiero que no. Pero siento que ahora que estoy apareciendo más en la tele, de repente vas por la calle y escuchas ‘ah, la China, no sé, que aquí, que allá’, pero después se vuelve a la normalidad», comentó.
Consultada por los cambios que ha presentado el show a lo largo de las tres temporadas en las que ha estado, Bazán asumió que hay importantes diferencias. «Las dos temporadas anteriores eran ‘famosos’, entonces no sabían nada de cocina. En cierto sentido, ahora puede ser más fácil porque la gente que está participando sí sabe de cocina, pero a la vez es más difícil, porque el nivel está mucho más exigente», afirmó.
Y es que China no solo se refería a los nuevos aprendices, también hizo alusión a la llegada del chef francés cuyo rol es ser un implacable juez. «Él es súper exigente, yo nunca había estado con él en este formato y en ‘MasterChef’, no lo había visto; pero es SÚPER exigente, se fija en TODO», señaló.
«Con Yann yo ya pongo los ojos en blanco porque ¿Qué más espera? ¿Piensa que está en un restaurant con Estrella Michelín? Si este es un concurso de cocina nomás», protestó mientras reía.
Finalmente, sobre sus nuevos discípulos, la chef aseguró que se siente bien con ellos y si tuviera que definir al grupo en una palabra, sería «unión». «Quizá porque soy la más joven de los tres chefs, o incluso ellos (los concursantes) son menores que yo… Entonces logro conectar muy bien con ellos, es muy de igual a igual», sostuvo para concluir.
De esta manera, queda esperar a este domingo, después de «Chilevisión Noticias», para que la nueva temporada de «El Discípulo del Chef» arribe a las pantallas de la estación de Paramount Global,