La irrupción de Emilia Dides ha resultado muy llamativa. Su belleza, talento artístico y personalidad no han dejado indiferentes a nadie, y revelan un tremendo potencial para transformarse en un futuro rostro preponderante del espectáculo chileno.
Su participación como candidata chilena al último Miss Universo fue notable. Se fue con muy bajo perfil, y de a poco fue concitando atención. Su “traje típico” que incluía una aparatosa rueda giratoria de “Sábados Gigantes”, que en un comienzo parecía un despropósito, terminó siendo una jugada publicitaria maestra. Existía la sensación que se podía repetir la historia de Cecilia Bolocco en 1987 y eso llevo a que Chilevisión transmitiera la final del evento, algo que no sucedía desde hace tiempo. Aunque finalmente quedó fuera de las finalistas, su gran desempeño le atrajo atención mediática y admiración, incluso en las generaciones más jóvenes que tienden a ser muy refractarias con los concursos de belleza femenina.
Es como el yerno de Edo Caroe. Su desempeño como presentadora en los recientes premios MUSA generó mucha atención. Emilia Dides es tan perfecta que llega a dar miedo. Es bellísima (si me dijeran que es un avatar creado por una IA, me la creo), canta como los dioses, es simpática e inteligente, tiene calle, se impone por presencia, y hasta pololea con un jugador de fútbol americano, el chileno Sammis Reyes.
La Reina de Viña 2025 es una «Doña Cantante»
Su participación en la obertura de la tercera noche de Viña 2025 nos permitió apreciar el talento vocal de la ganadora de “Rojo, El Color del Talento”. Tiene una voz privilegiada, y lo ha demostrado interpretando exitosamente canciones dificilísimas, reservadas para las grandes voces, como “I Will Always Love You” y “All By Myself”. Aprobó con honores los desafíos de cantar “Tu Falta de Querer” a dúo con Luis Jara y “Gracias a la Vida”, a dúo con Plácido Domingo en su último recital en Chile.
Se lució en el Festival de Viña. Fue parte del jurado de las competencias, y fue muy aplaudida durante las seis jornadas. Dides salió elegida reina del evento en una estrecha y polémica votación con Faloon Larraguibel, y para evitar rivalidades, decidió compartir el reinado con la chica reality. Esto revela que, al menos en apariencia, tiene la cabeza muy bien amueblada y los pies bien puestos en la tierra.
Emilia Dides, una diva del espectáculo chileno en potencia
Si Emilia decidiera desarrollar su carrera en Chile, tiene condiciones de sobra para transformarse en un rostro estelar con potencialidades de “diva”, en el sentido de referente mediático como fueron en algún momento Cecilia Bolocco y Raquel Argandoña. Actualmente hay escasez de “divas” en la TV chilena. La última que existió, Tonka Tomicic, venía con su imagen herida desde el Estallido Social, recién está volviendo a las pantallas después de su polémico sobreseimiento del “Caso Relojes”, y veo muy difícil que recupere su sitial.
Karen Doggenweiler ha visto revitalizada su carrera después de su destacada participación en el Festival de Viña. Otras como Karla Constant, Diana Bolocco, Andrea Arístegui, Monserrat Alvarez, Soledad Onetto, Constanza Santa María, María Luisa Godoy, Macarena Pizarro. María José Quintanilla, Carolina De Moras, Carmen Gloria Arroyo e Ivette Vergara son rostros eficientes, profesionales y cumplidores, pero están muy lejos de ser “divas”.
¿Le convendrá desarrollarse en Chile?
Por otra parte, las potencialidades de Emilia Dides dan para pensar que lo suyo pasaría más bien por una carrera internacional. Su participación en el Miss Universo la dejó muy bien vista en los medios, y perfectamente podría tener oportunidades en mercados mucho más amplios y fuertes que el chileno.
Le falta “la” gran canción. Hasta ahora su prodigioso talento vocal no se ha traducido en una carrera notable y destacada como cantante, que es su objetivo inicial. Si bien tiene canciones interesantes como “Quiéreme Bien” y “Hay Peligro”, todavía no ha logrado pegarle el palo al gato. Le falta un “El Hombre que Yo Amo”, un “Tu Falta de Querer”. Le falta una canción memorable, un “clásico instantáneo” que la ponga en órbita en la industria musical chilena y de habla hispana. ¿Su belleza le jugará a favor, o le pasará como a la española Marta Sánchez, cuya belleza y desbordante sensualidad llevó a que se la subestimara como cantante siendo que tiene un vozarrón de cantante de Gospel?
Dios mediante, tiene todas las posibilidades. Emilia Dides tiene 25 años Es super joven, tiene amplio margen de aprendizaje y crecimiento, y una gran potencialidad como cantante y rostro mediático. Si se asesora bien y toma buenas decisiones, el cielo será el límite para ella.