Algo que ha caracterizado a “Game of Thrones” son la infinidad de traiciones y muertes de personajes emblemáticos a lo largo de sus siete temporadas. Frente a ello, el elenco de la producción aprovechó la presentación en Nueva York de la octava y última temporada de la popular serie para elegir qué muerte de algún personaje ha sido su favorita.
Por ejemplo, Sophie Turner (que encarna a Sansa Stark) y Maisie Williams (Arya Stark), hermanas en la ficción, coinciden al elegir la villenta muerte de Oberyn Martell como su preferida. «Es difícil. La de Sean (Ned Stark) fue espectacular. Fue muy impactante porque nadie sabía que iban a matar a personajes principales. Pero mi muerte favorita, probablemente, sea la de Oberyn Martell. Cuando le destrozan el cráneo…», explicó Turner. «¡Amo esa escena! Fue muy triste, porque eché de menos a Pedro (Pascal)», añadió Williams. También otro de los miembros de la familia Stark, en este caso Bran (Isaac Hempstead-Wright), coincide: «No lo vi venir, no había leído el guión», señaló.
La muerte de Hodor también cuenta con varios adeptos. El propio Kristian Nairn, a cargo de interpretar al personaje, es uno de ellos. «Lloré la primera vez que la vi. Me resulta muy difícil verla, lo haré con el tiempo», contó. Conleth Hill (Varys) es otro que elige esta muerte como la primera en su listado. «Creo que tengo dos. La primera fue la de Sean Bean (Ned Stark). La segunda, la de Hodor: nunca lo vi venir, fue como… ¡¿Qué?!». Aidan Gillen, que encarna a Petyr Baelish, explicó que la desaparición de Hodor es su muerte y escena favorita. «La forma que juntaron su muerte con escenas de cuando era un niño… Fue muy emocional y devastadora», dijo.
Por su parte, Gwendoline Christie (Brienne de Tarth) escoge «la de Tywin Lannister en el lavabo», mientras que Liam Cunningham (Davos Seaworth) eligió el «descorazonador» momento en que muere Shireen. Iain Glen (Jorah Mormont) se inclina por la de Joffrey dada «la manera en la que se manifestó y cómo fue captada: esos ojos, la estrangulación…», y Pilou Asbaek (Euron Greyjoy) prefiere la muerte de uno de los personajes que más odio provocó, la de Ramsay, que fue devorado por sus propios perros. «Una muerte muy escandinava, es brutal y se la merecía».