Este lunes la teleserie de Mega tendrá una devastadora escena que protagonizarán Malú (Coca Guazzini) y Armando (Héctor Noguera). La madre de Alonso (Diego Muñoz) no podrá ocultar su pena cuando su amado olvide a otra de las personas más importantes de su vida.
En «Como La Vida Misma», Marco (Andrés Velasco) y Bea (Carmen Zabala) se van a casar, noticia que indignó a Carol (Octavia Bernasconi). El padre de los Morales García le pedirá a Malú que le pida ayuda a San Expedito y, de forma inmediata, recibirá un mensaje de su hija aceptando hablar con él y arreglar las cosas.
Una vez que queden solos los personajes de Guazzini y Noguera, éste le preguntará de qué matrimonio estaba hablando Marco. Malú, con cautela y cariño, intentará explicarle sin éxito a Armando que su hijo se va a casar con Bea, su polola. Sin embargo, él ya no la recordará.
Malú y el olvido de Armando
«Es la polola de Marco, la que usted le encanta, esta chiquilla alta, buenamoza, que se cambia el color de pelo todo el tiempo tiempo y que a usted le llama tanto la atención», le dirá Malú a Armando, describiendo al personaje de Zabala. «La Bea, que es mucho menor que Marco, pero que se adoran igual que nosotros«, sumará.
«¡La Bea! Se acuerda, ¿cierto? Sí se acuerda«, expresará Malú, comenzando a ponerse cada vez más nerviosa con la situación, agregando que «si a usted le encanta ella porque dice que siempre alegra la casa. ¡La Bea, pues!».
En este desesperante momento, Malú recurrirá a todo lo que está en sus manos para que Armando recuerde. Le leerá la libretita de anotaciones donde él escribió con su puño y letra que Bea era la polola de Marco. Luego, le mostrará una foto de su nuera en su celular. Nada resultará.
«¿Pero cómo se va a casar si mi hijo ya está casado con la Sole (Sigrid Alegría) o le está poniendo el gorro?«, le preguntará un confundido Armando, a lo que Malú se lo negará y tratará de cambiarle el tema, ya derrotada.
Buscará alguna excusa para ir a la cocina y allí, completamente destrozada, Malú abrirá la llave del lavaplatos para que Armando no la escuche llorar y por fin podrá sacar afuera todo su dolor. Es el principio del fin.