Se daba como una situación inédita. El pastor evangélico llegó hasta el programa de Vía X para conversar sobre su postura religiosa respecto a diversos temas, pero su comportamiento terminó por colmar la paciencia tanto del conductor y de quienes trabajan en el espacio.
José Miguel Villouta comenzaba una nueva edición de «El Interruptor», esta vez con un invitado bastante especial: el reconocido Pastor Soto. Pese a que la intención era realizar una entrevista formal, el religioso lo único que logró fue provocar a todos los que estaban presentes.
Tras la primera pregunta, Soto saludó a Villouta con un apretón de manos y, posteriormente, pidió autorización para comenzar la charla con un rezo. Una vez que se tomó sus minutos, el conductor quiso continuar con la entrevista, pero su invitado no se detuvo a responderlas. De hecho, continuó con su provocación y sacó la bandera que representa a la diversidad sexual para usarla como alfombra y después pisarla.
«Yo encuentro que es una falta de respeto», le dijo José Miguel al ver lo que estaba ocurriendo, aunque el evangélico sólo se excusaba asegurando que cada vez que lo invitaban, tenía dicha costumbre. En ese momento, ingresó al estudio la directora de contenidos de Vía X para señalarle que lo que estaba haciendo era algo que no lo iban a tolerar, lo que terminó con el pastor saliendo del estudio.
Puedes revisar el incómodo momento en el siguiente video:
