La cruzada solidaria tuvo que suspender la edición del año pasado y postergarla para abril de este año, donde además se aplicaron todo tipo de medidas sanitarias a raíz de la emergencia sanitaria por el coronavirus, cambiando por completo el formato. Aún así, lograron superar la meta de manera holgada.
Sin embargo, esto no es suficiente. La próxima edición de la Teletón, que se pensó en un minuto realizarla durante el último trimestre del 2020, se canceló definitivamente por la pandemia y ante este nuevo escenario, se estaría evaluando de realizar dos eventos durante el 2021.
“Estamos pensando en hacer una (Teletón) en abril y otra en noviembre. Estamos pensando en hacer cosas distintas, porque yo creo que vamos a salir un poco diferentes de esta pandemia, hay cosas que llegaron para quedarse, esto ya no tiene fronteras”, señaló Mario Kreutzberger, Don Francisco, a La Tercera.
Es que pese a que se reunieron más de $34 mil millones en abril, aún se mantiene un desfase luego que la campaña de 2019 cambiara para abril por el estallido social. Eso se suma que por la pandemia, la Fundación Teletón ha tenido que realizar gastos extra.
Sobre esto, el animador aseguró que “si puede ser presencial la vamos a hacer presencial, pero depende de la situación en la que esté el país. O la hacemos mezclada, presencial con virtual, porque virtual además permite la incorporación de mucha gente. A lo mejor hacemos un contenido distinto que se adecue más a la situación que haya en ese momento”.
Por otro lado, Kreutzberger se refirió a la posibilidad de realizar un «Chile Ayuda A Chile» para ir en ayuda de los más afectados por la crisis que ha provocado el coronavirus en el país. Este evento aún está en evaluación, pero recién podría llevarse a cabo de agosto en adelante, siempre pensando en cómo estará la situación del país para ese entonces.
En ese sentido, Don Francisco sostuvo que se hace necesario “readaptarlo, porque el ‘Chile Ayuda A Chile’ es muy específico, es después del terremoto, después del aluvión. Y aquí la dinámica es que esto está ocurriendo todos los días, en todas partes, en todas las clases sociales, porque indudablemente de aquí el más rico va a salir menos rico, pero el más pobre va a salir muy pobre”.
“Pienso que no debemos casarnos con un formato, con un nombre”, cerró.