Más de diez días estuvo internado en la Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Alemana a raíz de una disección aórtica que sufrió y que lo tuvo al borde de la muerte.
En conversación con el diario La Cuarta, Dino Gordillo reveló que todo ocurrió cuando se encontraba con su familia en su parcela. Tras desayunar, «de repente siento un fuertísimo dolor en la espalda, como si me hubiese pateado un caballo, el dolor me atravesó hacia el pecho y caí al suelo. Gritaba de dolor y nadie en casa me escuchaba, me arrastré como pude, golpeaba el suelo con mis manos y por fin mi esposa se levantó y despertó a mis hijos, quienes entre todos me intentaron levantar para llevarme a la cama, era imposible por lo que me subieron a la camioneta para llevarme a la clínica».
«Sentía en muchos momentos que me iba. Hice todos mis esfuerzos, rogaba a Dios y a la virgen que no me llevara, ya que tenía una familia hermosa por la que seguir luchando y me había sacado la cresta toda mi vida para lograr lo que tenía. Todo eso me ayudó a luchar», contó el comediante.
Además, agradeció los mensajes de apoyo que recibió durante estos días. «Fue algo maravilloso, mucha gente fue a la clínica, me envió mensajes, llamadas. Ahí es donde uno se da cuenta de que ha hecho las cosas bien. Felizmente, tengo una mujer maravillosa que estuvo todo el tiempo conmigo además de mis hijos que no se despegaban nunca. Eso me daba aún más fuerzas», señaló.
A pesar de su crítico estado, Dino Gordillo volverá a pisar un escenario el próximo fin de semana cuando sea parte de “Coihueco y sus raíces criollas”.