El recordado segmento de la última época de “Morandé con Compañía” ha retornado en gloria y majestad a la TV abierta a través de las pantallas de Chilevisión. ¿Esto marca la vuelta del tan criticado “humor clásico”? Tema a discutir.
El ostracismo del “estilo Morandé”. El Estallido Social, y posteriormente la pandemia, le dieron el tiro de gracia a un “Morandé con Compañía” que venía dando evidentes signos de desgaste después de 20 años, y que en su última época giraba en torno a “Detrás del Muro”. Luego de eso, los integrantes se dividieron en diferentes proyectos: el fracasado “Mi Barrio”, que posteriormente dio paso a “Paola y Miguelito”, y el breve pero recordado “Políticamente Incorrecto”, uno de los programas emblemáticos de la “Era Octubrista” de La Red. El “patrón de fundo” entró en un proceso de hibernación mediática donde, salvo una interesante incursión en YouTube, no se le vio mucho en pantalla.
Los vientos volvieron a ser favorables para la comedia “clásica”. Luego de la irrupción del stand-up, empezó a producirse un fuerte cuestionamiento en torno al “humor clásico”, en particular por su predilección por el bullying, la misoginia, el sexismo, la homofobia y la tendencia de reírse. De los comediantes clásicos, solamente Bombo Fica y Dino Gordillo lograron mantenerse.
Sin embargo, el tiempo y la necesidad de comedia liviana para hacer más llevadera una época estresante hicieron que se revalorizara la comedia pre-estallido. El primer indicio de aquello fue la temporada de “El Purgatorio”, cuyos mejores programas fueron aquellos en los que los invitados eran comediantes.
Por otra parte, apareció una nueva generación de exponentes del stand up, encabezada por Luis Slimming, Marcelo “Coronel” Valverde y toda la tropa de “El Sentido del Humor”, que, a diferencia de las generaciones anteriores, valorizaron y elevaron a la categoría de “referentes” a los comediantes antiguos.
La apuesta es prometedora. El éxito de la presentación de “Detrás del Muro” en la reciente Teletón generó el ambiente necesario para el retorno del programa a las pantallas televisivas. Han tenido altibajos en cuanto a rating, pero en general siguen dando batallas.
Un rejuntado de comediantes sueltos. “Detrás del Muro” es como esos planteles de fútbol de bajo presupuesto armados con jugadores postergados o desechados de otros equipos. Tenemos comediantes que fueron parte de fenómenos mediáticos como Cristián Henríquez (Ruperto, Rupertina, El Patrón del Pan. Michael Jackson Pérez), Kurt Carrera (Salomón y Tutu Tutu), María José Quiroz (Las Iluminadas), Beto Espinoza (Bebeto Chupeta), Gustavo Becerra (el Guatón de la Fruta); Pato Fuentes (ex integrante de “Los Cuatro Octavos”); además, están los líderes de “Políticamente Incorrecto” Belén Mora y Toto Acuña; y Paola Troncoso. Miguelito (Hans Malpartida) estará presente en parte de la temporada, pues actualmente está cumpliendo su sueño de ser parte del Cirque Du Soleil, el equivalente circense a jugar en la Premier League.
Hay mucho talento para la comedia en este grupo. Algunos de los sketchs de esta temporada han sido notables, incluso recordando la mejor época del Jappening con Ja. La versión de “Jesucristo Superstar” protagonizada por Toto Acuña disfrazado de “Luis Hermosillo” fue memorable. El funeral de “MIKE CTM” es una obra maestra, y reflejó la visión que tienen las antiguas generaciones de los exponentes del género urbano. Además, han sabido escoger muy bien a sus invitados: Julio César Rodríguez, Paty Cofré, Diana Bolocco, Jorge Alís, Marlen Olivari y Marcianeke.
¿Detrás del Muro es “comedia clásica”? En estricto rigor, este bendito rejuntado está asociado a la última época de “Morandé con Compañía”, cuando estaban reducidos a uno o dos días a la semana. La “comedia clásica” con la que se asocia al programa de Kike Morandé es la de su “época de oro”, la de las “musas” (Sita Jeanette, Marlen Olivari, Porotito Verde, Carla Ballero, Blanquita Nieves, Lola Melnyck, Mey Santa María), con el canto de cisne de la insigne generación de comediantes revisteriles (Daniel Vilches, Chicho Azúa, Eduardo Thompson), de la cual solamente queda doña Paty Cofré; con Charly Badulaque, Tony Esbelt y principalmente Ernesto Belloni. Época de humor de doble sentido, del criticado humor de la “vieja escuela”. “Detrás del Muro” no es eso. Ocupan el doble sentido (si fuera por eso, hasta Les Luthiers lo hicieron), pero no se aprecian burlas ni nada muy tóxico. Es más bien comedia de viñetas y sketchs sumamente simpáticos. Lo más cercano que hemos tenido en Chile al mítico “Saturday Night Live”.
El contraste con “El Antídoto”. Lamento reconocer que el programa de Fabrizio Copano fue uno de los mayores fiascos televisivos del año pasado. Fue como un equipo de fútbol que arma un verdadero “Dream Team” con jugadores talentosos, pero que terminaron peleando por evitar el descenso. La asociación de talentos del propio Fabrizio, Luis Slimming y sus secuaces de “El Sentido del Humor”, Kurt Carrera, María José Quiroz y Karol Blum, entre otros, no logró proponer una comedia que encantara al público de la TV abierta. Las causas pueden ser varias: aparte de cierto desorden en el programa, les pesó mucho el estigma del “humor progre” o “humor woke”, o como le llamó Fabrizio, “Morandé con Comunistas”. Además, se notaron las diferencias generacionales entre comediantes cuyo humor apunta a las nuevas generaciones y una audiencia televisiva nostálgica de la comedia “de antes”.
“Detrás del Muro”, a diferencia de “El Antídoto”, entrega la comedia que al público de la TV abierta le interesa ver, simpática y liviana, y con cero carga ideológica.