La vocalista de Saiko dio a conocer a través de una columna en El Mostrador que, hace cuatros años, recibió ofensas verbales en el programa «El Amor es más Fuerte» de la radio del Instituto Nacional de la Juventud (INJUV), cuando los tres conductores comentaron la clase de objetos que podrían introducir en sus partes íntimas.
Denisse Malebrán denunció que en 2014 los comediantes Ignacio Socías, Beno Espinosa y Lucas Espinoza realizaron una rutina radial la cual «se basó en situar ‘cosas’ de una amplia dimensión que podrían caber en mi vagina. Sí, lo que leen. Tres conductores competían en la genialidad de mencionar qué podría entrar en ese espacio de mi cuerpo en que, aseguraban, podía encontrarse objetos de gran valor sentimental, como el esperado estadio del Club Deportivo de la Universidad de Chile o cosas de menor importancia, pero de un porte imponente, como toboganes y/o aviones, que se caracterizan por su gran tamaño».
«No conformes con el calibre de la humillación pública, en la que instaban al público a participar y mencionar qué otros objetos de gran tamaño podían estar dentro mío, fueron más allá y salieron ‘bromas’ como que en mi vagina se encontraban restos de los Detenidos Desaparecidos y también los de Felipe Camiroaga», agregó.
La cantante cuenta que se enteró de la situación a través de la cuenta de Twitter de Socías quien «comenzó a alardear» de lo que estaban comentando: «Orgulloso de su sketch, subió a su cuenta cada una de las cosas que hoy les cuento, festinando con la suma de personas y objetos que se podían observar en mi interior si me pusieran en la posición que te entregas arriba de una camilla ginecológica», añadió.
En aquel año, el humorista era parte del elenco del Club de la Comedia y, según relata la cantante: «La historia llegó a oídos del entonces director de Chilevisión, lo que causó su salida inmediata del espacio televisivo. Por supuesto que el sujeto no quedó conforme con la decisión tomada y, en vez de enfrentar las consecuencias de su actuar, me culpó a mí, a viva voz, de ser la responsable de su salida. Una ‘mafiosa’ escribió desde su cuenta de Twitter, acusando ser perseguido por ‘emitir opiniones’ sobre un personaje con poder'», expresó.
Acto seguido explica que ella no lo denunció ni a Chilevisión ni a la radio, para después asegurar: «No, no fui yo la que le causó daño al señor Socías, me lo causó él a mí junto a otros, riéndose de mi condición de mujer cuestionada públicamente en una infantil asociación que hacía referencia a mi dignidad como persona».
Su silencio se debió a la vergüenza que sintió de ser la protagonista de aquellas burlas: «Quiero que imaginen el pudor de reproducir lo que había pasado. Tener que explicar que había unos ‘tipos’ que hacían chistes sobre mi vagina y que, en medio de su carrera por hacerse notar como creativo, habían usado la figura de un conductor trágicamente fallecido y la violación a los derechos humanos de compatriotas que fueron desaparecidos. No, no había una forma cuerda de abordarlo y solo me sumí en una vergüenza incomprensible de no entender el ‘por qué a mí'», comentó.
El motivo de que hoy cuente lo que sucedió se debe a que Espinosa le escribió por Whatsapp el pasado viernes para disculparse antes de que ella asista al programa «Fea Latitud», el cual él anima: «La urgencia de Espinoza para conversar, era identificarse como otro de los conductores del programa en que me agredieron sexualmente el 2014 y quería disculparse. Habían pasado cuatro años desde su brutal participación y ahora, a días de estar frente a frente, se atrevía a decirme que fue un error que le avergonzaba y que esperaba que recibiera sus disculpas»,
«Hasta hoy no sabía que uno de mis agresores anima este programa de TV no que Socías lidera un programa con bastante éxito (‘Frente Fracasados’) y que actúa en vivo haciendo stand up con mujeres comediantes sin una gota de vergüenza», expresa.
«No acepto las disculpas, ni me presto para el show de ir a un programa a enfrentar la incomodidad de una explicación que nunca será lo suficientemente decente, porque nadie merece ser tratado de la forma en que me trataron», culmina.