Dice que no se le caen las bandejas… ni los anillos. De ser rostro televisivo de CHV –ex animador de Sabingo, Manos al Fuego y Espías del Amor-, tras su polémica desvinculación del canal a fines de diciembre pasado, ahora el periodista César Campos atiende mesas en un restorán familiar –el Pistacho Food Market-, inversión que hace casi tres años hiciera junto a su madre y hermano.
Según relató en la entrevista que le hizo LUN, desde febrero se encuentra atendiendo al público desde las 15 horas, aunque reconoce que lo suyo hasta ahora no ha sido la eficiencia. “Antes estaba en la caja, pero mi mamá me sacó porque la gente me empieza a hablar, se alarga la fila, y se pone lenta la cosa. Ahora en las mesas, cuando voy a atender, me empiezan a preguntar sobre la tele, entonces el servicio se pone lento, tampoco soy muy eficiente…”, dice el profesional, aunque reconoce que estar ahí es una buena estrategia de marketing. “La gracia de tener local es que uno lo atienda”.
Claro que antes de eso no iba mucho al lugar porque las personas creían que había cámaras ocultas. “Pensaban que era de ‘Manos al Fuego’ y que estuviera yo acá (en vez de incentivar la visita) era el efecto contrario”, contó.
Comenta en la publicación que cuando hace poco un cliente lo vio y le preguntó si trabajaba ahí, él le había respondido que “si poh, usted sabe que como la tele está tan mal hay que empezar a tirar currículum por todos lados”, aclarándole después que se trataba de un negocio familiar.
Respecto de si echa de menos la televisión y le gustaría volver, Campos aseguró que “es un trabajo más (…) Hoy la tele tiene importancia, pero uno se conecta a través de redes sociales. Me encantaría volver, pero no es una urgencia, por lo mismo no acepté quedarme (en Chilevisión) por la mitad del sueldo. Yo podría vivir de lo que me da el local, es algo donde queremos seguir creciendo (…) Uno tiene que buscar qué hacer. La televisión no es todo”.