El encierro por el Covid-19 cambió radicalmente la forma en que trabajamos, el cómo nos comunicamos y entretenemos. Es por ello que la
principal plataforma de video en el mundo, analizó las tendencias de visualizaciones durante los últimos meses, y encontró que los usuarios a nivel mundial tienen algo en común: el interés por el cuidado personal, la conexión social y la identidad.
El inesperado inicio de la pandemia permitió ver una gran uniformidad en las tendencias de contenido de YouTube, los que se dispararon en todo el mundo. Esta coincidencia de intereses ayudó a demostrar la realidad de nuestras necesidades compartidas: experimentar un sentido de conexión, sentirse lo mejor posible y proyectar un fuerte sentido de identidad .
En cuanto al tema del cuidado personal, la ansiedad e incertidumbre desencadenadas por la pandemia en todo el mundo llevaron a las personas a buscar herramientas para hacerle frente. Regular la energía y reducir las preocupaciones parecen ser muy importante en Chile, de ahí que uno de los videos de ejercicio más vistos en los últimos meses es el de «Yoga para principiantes» de Malova Elena. En tanto, el peak de búsquedas en
Google sobre este tema se registró el 9 de abril.
Otro aspecto que tiene relación con el cuidado personal es que, a nivel global, las visitas relacionadas con la meditación guiada aumentaron más del 40% después del 15 de marzo.
Con relación a la conexión social, como el distanciamiento social y el aislamiento restringieron severamente la capacidad de las personas para conectarse, la tecnología fue una herramienta que sirvió para ayudar a cerrar la brecha. Los espectadores de YouTube usaron los videos para interactuar entre ellos directa e indirectamente, a veces de manera matizada. Incluso sólo participar en una tendencia puede hacer
que alguien se sienta más conectado con otras personas. Un ejemplo son los videos agrupados en «conmigo», donde creadores y espectadores comparten una actividad de forma indirecta. Las visualizaciones de estos contenidos crecieron un 600% desde el comienzo del aislamiento.
Si bien es cierto que la cuarentena interrumpió la producción de muchos creadores, otros como el canal nacional de Woki Toki , convirtieron esto en una oportunidad de colaborar de una nueva y divertida forma al retratar las frases que todos hemos escuchado durante el confinamiento, en un
formato muy familiar. Por otro lado, el vínculo entre «31 Minutos» y UNICEF para hablar de los retos del aprendizaje en casa alcanzó más de 400 mil visitas.
Por último, relacionado con la identidad, las personas buscaron reafirmarse y redefinirse a sí mismas a medida que la pandemia cambió los planes, los trabajos y los innumerables factores que juegan un papel principal en la autopercepción. El video demostró ser una forma única en que las personas podían expresar quiénes eran y en quién podían convertirse, por ejemplo, aprendiendo una nueva habilidad.
En Chile, los videos sobre cómo cortar el pelo alcanzaron un peak de visualizaciones tanto la segunda semana de marzo como la primera de junio, sugiriendo la importancia de la valoración de la apariencia y la búsqueda por recuperar algo de familiaridad. También se destacan las vistas de contenidos relacionados con aprender a cocinar y jardinería. Además, surgió un nuevo tipo de tutorial, los consejos de belleza para videollamadas.
Todo esto respalda un argumento que la pandemia continúa demostrando: no importa cuán diferentes seamos, todos/as necesitamos ayuda de vez en
cuando, sobre todo en momentos más complicados como son los actuales. Y en este sentido, los videos se han convertido en importantes aliados a la hora de resolver tareas diarias, realizar actividad física, aprender nuevas cosas y entretenernos.