Aunque vinculados a los deportes, lo cierto es que Ivette Vergara y Fernando Solabarrieta han abocado sus carreras al ámbito del periodismo y las comunicaciones. Sin embargo, ninguno de sus hijos ha seguido el camino de sus padres, demostrando vocación justamente por aquello que sus progenitores comentan de manera profesional.
Nicolás, por ejemplo, quiso ser futbolista, pero tuvo escaso éxito en las canchas y desde entonces se ha vuelto un rostro habitual en diferentes reality shows de la televisión chilena. El menor, Iñaki, también busca calzarse los botines de fútbol para ganarse la vida.
Maite Solabarrieta Vergara, por su parte, se fue a Estados Unidos en 2021, país al que viajó tras ser aceptada en la The University of New Orleans, donde estudió con una beca deportiva por su destacada trayectoria como voleibolista.
En ese momento fue parte de los New Orleans Privateers, el equipo de voleibol de dicha casa de estudios. Allí estuvo hasta 2023, para luego migrar a otro estado, Oklahoma, para integrar el Oral Roberts University y jugar por el plantel de dicha institución.
No obstante, al parecer, los días de Maite Solabarrieta en esa disciplina deportiva llegaron a su fin, dejando a la joven con el corazón destrozado.
Mezcla de emociones
Es lo que se concluye a partir de un posteo que publicó en su cuenta de Instagram. Escrito en inglés, el texto señala que había estado posponiendo esta publicación “porque me duele demasiado la idea de no tener más voleibol. Pero al mismo tiempo, no puedo dejar de decirle adiós al deporte que me dio tantas alegrías y la razón detrás de tantos momentos que me hicieron la persona que soy hoy”, detalló la hija de Fernando Solabarrieta e Ivette Vergara.
Continuó agradeciendo a todos los que fueron parte de su camino. “No podría haberlo hecho sin ustedes. No tengo suficientes palabras para expresar la mezcla de emociones que he estado sintiendo desde la noche de los seniors”.
Y agregó un elocuente: “Con el corazón roto por cerrar este capítulo de mi vida”.
Finalmente, manifestó su felicidad por las personas que conoció y la carrera que tuvo, reiterando su amor por el deporte al que hasta ahora se había dedicado, su familia, entrenadores y compañeras de equipo.
En la publicación, la joven también compartió una serie de fotos del partido que marcó su despedida oficial de la actividad, en varias de las cuales aparecen sus padres, quienes viajaron a Estados Unidos para acompañarla en esta ocasión tan especial.
¿Cuál es el futuro de Maite Solabarrieta? Quizás igual siga ligada a los deportes, aunque ya no dentro de las canchas de vóley. Pero no hay duda que todavía deben haber muchos caminos que la hija de Fernando Solabarrieta e Ivette Vergara pueda explorar.