«El Señor de la Querencia» dio inicio a los remakes que ha hecho Mega, donde Gabriel Cañas fue el encargado de interpretar al malvado José Luis Echeñique. Al ser el primer proyecto de este estilo, las críticas y comparaciones no estuvieron ausentes.
Y es que en redes sociales para los usuarios fue inevitable poner en paralelo las escenas de la versión del canal privado con la que emitió TVN en 2008. Sobre este mismo tema, el protagonista de la nocturna que finalizó hace unas semanas se refirió en conversación con Fotech.cl.
Respecto a cómo manejó las críticas por esta nueva versión de «El Señor de la Querencia», Gabriel Cañas confesó que no vio las redes sociales, «concentrándote en la pega, yo no leí nada. Yo me fijo en la calle».
«Vivo en Recoleta, tengo mucho contacto con la gente de mi barrio, ando en bicicleta. Ahí es cuando voy sintiendo más si la gente le gusta, si la gente la ve, si les doy miedo. Ahí voy midiendo«, aseveró el intérprete.
Además de las críticas: Gabriel Cañas reveló lo más difícil de grabar «El Señor de la Querencia»
Interpretar a José Luis Echeñique en «El Señor de la Querencia» fue todo un desafío para Gabriel Cañas, más allá de las críticas que surgieron por esta nueva versión. Así, reconoció que una de las dificultades que tuvo fue que «estaban todos los capítulos escritos, por lo tanto, tenía que estudiar mucho«.
«Se grababa en desorden, de repente me tocaba capítulo 8 y de ahí el 60, entonces tienes que tener 60 capítulos en tu cabeza. Eso no pasaba con la otra teleserie, ‘Generación 98’, porque la iban escribiendo en el momento, era más fácil el estudio», explicó.
Sobre su postura respecto a los remakes, indicó que «mientras haya pega para todos, me parece bacán. Nadie está contratado, hay muchos audiovisuales que están sin pega. Mientras haya trabajo…».
Aún así, recalcó que «los desafíos son más grandes, uno tiene que reapropiarse de algo que ya está hecho, está siempre esto de la comparación y hay que sobreponerse a la presión mediática que existe. Tiene esos peros. Como grupo de trabajo requiere acordar más cosas, más juntos y concentrados».