Esta noche, a las 22:30 hrs., Chilevisión estrena una nueva temporada del programa policial que conduce Carlos López. Conversamos con él de manera exclusiva, donde nos contó detalles de lo que podremos ver en este nuevo ciclo, el que se diferenciará completamente de los anteriores. Por otro lado, comentó cómo ve el panorama del canal respecto a los números que se han obtenido en el prime en los últimos meses.
¿Cuáles son las novedades de esta nueva temporada?
A diferencia de los anteriores, en que estuvimos en plena calle haciendo los procedimientos policiales, ahora quisimos darle una vuelta de tuerca y básicamente indagar qué había pasado con aquellos sujetos que habían sido detenidos en su minuto y no quedaban en libertad. Tratamos de buscar a los viejos protagonistas de las temporadas anteriores que estaban privados de libertad, y quisimos saber en qué estaban ellos. Aprovechamos la oportunidad, además, de conocer cómo es la vida intrapenitenciaria, cuáles son las principales dificultades que se enfrentan los internos y los propios gendarmes en el día a día, y todo eso captado al estilo que ya se conocía en «Alerta», con cámaras en primera persona que permite, básicamente, que las personas se posicionen prácticamente en el lugar de los hechos. En este caso, en el interior de las cárceles más complejas y peligrosas como Colina 2, la ex Penitenciaría, Valparaíso, Rancagua, Concepción, en fin. Donde está lo más graneado del choclo, por así decirlo.
¿Cómo fue esta experiencia para ti, en lo personal?
Fue súper enriquecedora, porque para poder entrar a las cárceles no solamente, en lo personal, sino que todo el equipo con el que trabajamos día a día, tuvimos que tener un proceso de inducción, la que implicó una capacitación física y psicológica para afrontar los miedos que, créeme, son bastantes pasando la última de las rejas y encontrándote cara a cara con los internos. Eso implicó preparación física, saber cómo enfrentar situaciones límites, con lo que nos vamos a encontrar en el interior de los patios, cómo vamos a poder afrontar un ataque con arma cortopunzante. Porque, uno de los principales problemas que uno se enfrenta en las cárceles, es el eventual ataque con estoques, que son creadas por los propios internos que, de una u otra forma, con la que tratan de marcar su territorio, con su ley del más fuerte. Fue alto el proceso de inyección de adrenalina que tú tienes y que se ve incrementado en diez cuando estamos ya en situaciones reales.
¿Viviste alguna experiencia al límite dentro de las cárceles?
Sí, me tocaron situaciones bien complejas. En una oportunidad, cuando estábamos acompañando a efectivos de Gendarmería que trataban de realizar un control en una de las tantas peleas, obviamente nuestro equipo estuvo al límite de recibir algún tipo de agresión física con estas armas cortopunzantes. Así mismo, me tocó ingresar vestido de gendarme, me tocó formar parte del equipo anti-botines, el GEM. Dentro de estos operativos del GEM nos tocó desalojar varias de las galerias donde estaban los reos con mayor compromiso delictual y percatarnos de cómo trataban de poner resistencia y así mismo encontrar la famosa chicha artesanal, la cantidad de celulares que salen dentro de los allanamientos es impresionante, y darte cuenta de lo creativo que pueden ser ellos para ocultarlos de una forma más que creativa.
¿Cómo fue la reacción de los reos con ustedes?
En un primer momento estaban así como desencajados. Nosotros estamos grabando desde septiembre-octubre del año pasado, o sea han sido varios meses en que, en un primer momento, se veían bastante reticientes, pero con el paso del tiempo se dieron cuenta de que éramos parte del día a día en cada una de las cárceles. Recién se vinieron a dar cuenta que yo soy la persona que está con una cámara, y ahí decían ‘ahh, Alerta Máxima, andai puro sapeando’ y se acordaban de mi parentela, de mi madre… En fin, te puedes imaginar la cantidad de gritos. Pero dentro de todo, ha habido bastante respeto hacia el equipo y hacia mi persona, especialmente. Varios de los internos, que varias veces fueron protagonistas de mis notas que presento en el matinal, me encontré con los mismos protagonistas cara a cara, y en vez de recibir insultos o agresiones físicas, más de alguno me pidió acercarme a la reja donde estaba y conversar. Me decían ‘oye varias cosas de la nota son ciertas pero esto no es tan así’, entonces existe la disposición para conversar y eso es súper bueno. No faltan los cobardes que, al son de gritos de la lejanía, tratan se sembrar un poco de miedo. Por otro lado, en la cárcel de mujeres, fíjate que uno de mis periodistas que trabaja conmigo, se llevó varios piropos de las internas. Y no solamente de las internos, sino que también el mismo periodista se llevó varios piropos de parte de los grupos trans. Eso fue divertido y está registrado, va a ser parte de lo que vamos a mostrar. Porque una de las características que tenemos en el programa, no solamente la adrenalina, teníamos también el humor. El humor se mantiene y me he potenciado con varios personajes que son bastante inesperados dentro de una cárcel, pero que te lo puedes encontrar y vas construyendo historias que son bastante sabrosas en la vida que viven los hermanos, que son los evangélicos, las historias de los grupos trans. Hay cosas que son bastante entretenidas, yo siempre dije en las temporadas anteriores que esto era como una montaña rusa de emociones y eso se mantiene ahora tras las rejas.
Chilevisión ha estrenado varias apuestas nuevas que no han obtenido la sintonía esperada. Ustedes como equipo, ¿se sienten presionados con obtener la misma sintonía que temporadas anteriores? Teniendo en cuenta que son uno de los programas más vistos del canal.
Afortunadamente hemos tenido un público cautivo que siempre nos ha acompañado en las temporadas anteriores. Yo espero, y así también lo hace todo el equipo, que esos buenos logros, podamos repetir esos buenos logros, esos buenos puntos. Hemos hecho un trabajo súper a conciencia, súper disciplinado y con mucho cariño para que la gente siga con nosotros. La verdad es que yo creo que sí, tal vez no vamos a tener los números que tuvimos en temporadas anteriores porque, lamentablemente, la pantalla en horario prime nuestro la gente no nos está acompañando. Queremos a nivel de equipo y de canal, ser el punto de inflexión para que de aquí en adelante puedan venir las cosas buenas para Chilevisión. Sabemos que los números no nos han acompañado, pero estoy seguro que están los ingredientes necesarios para que la gente vuelva a creer en el nombre de Alerta Máxima y de aquí para adelante a ver la luz con buenos números y buena sintonía en el prime de CHV.