Durante la audiencia de formalización, la jueza Marcia Figueroa Astudillo determinó mantener bajo resguardo el nombre y el domicilio del uniformado por su seguridad.
Este martes se llevó a cabo la audiencia de formalización del carabinero de iniciales T.P.R.S., acusado del delito de apremios ilegítimos en contra de la actriz María Paz Grandjean, quien el viernes 18 de octubre de 2019 fue herida con un balín en el rostro en el marco de las manifestaciones del estallido social.
La magistrada Figueroa determinó que el funcionario policial deberá cumplir la medida cautelar de arresto domiciliario parcial nocturno, arraigo nacional, prohibición de portar armas de fuego y municiones; además de informar traslados y el lugar donde preste servicios cada 15 días, durante los 120 días que dure la investigación.
Durante la audiencia, se determinó que pese a las manifestaciones que se registraban en la Alameda, el imputado debió evaluar la situación a la hora de hacer uso de su arma puesto que en ese momento no había afectación a su integridad.
«Por el tono del lenguaje utilizado por la víctima, lo cierto es que el medio utilizado, una escopeta antidisturbios, aparece como desproporcionado. No existe ninguna justificación para el empleo del armamento utilizado en contra de la víctima”, explicó la jueza.
Una vez que Grandjean fue herida, “un agente del Estado tiene la obligación de proporcionar auxilio a la víctima, lo que no fue evidentemente efectuado por ninguno de los funcionarios policiales, especialmente considerando que el imputado era el jefe de la patrulla en una institución jerarquizada como Carabineros”.