Eva Gómez se reunió con Karen Doggenweiler para conversar sobre el Festival de Viña del Mar. La española recordó los buenos y también malos momento que vivió cuando fue animadora del certamen.
En el programa «Camino a Viña«, la sevillana habló de un chascarro que vivió en la Quinta Vergara, cuando todo el público le gritó «¡Cara de cuica!».
«Arriba del escenario nunca dije ningún garabato. Me cuidé y todo», contó Eva Gómez, quien reconoció ser buena para decir algunas malas palabras.
El problema se generó antes de que empezara la transmisión televisiva cuando ella quiso ir al baño y tuvo problemas con el cierre del vestido. «Entonces, digo ¡Pu… la we…, no baja!», comentó la animadora.
Ella pensaba que su micrófono estaba apagado, pero estaba equivocada, ya que todo la Quinta Vergara había escuchado su frase.
«Me gritaban ¡cara de cuica! y a mí me corrían las lágrimas», contó la ex animadora del «Diario de Eva». A pesar de que equipo le decía que no se preocupara y que no era nada grave.
La relación de Eva Gómez con el animador del Festival
Eva Gómez también se refirió a los rumores de que se llevaba mal con Rafael Araneda, su compañero en la animación del Festival de Viña del Mar.
«Jamás nos peleamos…Efectivamente no somos amigos. Yo no conozco su casa, él no conoce la mía», señaló en el programa de Mega.
La conductora comentó que para ella el vincularse fuera de un escenario «es un punto de inflexión, que transgrede la televisión y el compañerismo laboral».
Otro de los temas que comentó fue las duras críticas que recibió cuando era animadora del Festival de Viña del Mar y que no tenían relación con su desempeño en el escenario.
«En esa época habían muchos programas de farándula y hablar es gratis. La gente no se da cuenta de que hace daño. Mucha gente xenófoba que decía: ‘¿Por qué una española?’…También que era gritona, chica, fea, gorda», recordó la española.
Incluso, contó que tanto le afectaron estos comentarios que el segundo año que estuvo en el certamen casi desarrolla un trastorno alimentario.