Una histórica situación ocurrió el sábado a la espera del piscinazo de Kika Silva. Una manifestación protagonizada por habitantes de la población Felipe Camiroaga, quienes exigieron que la Municipalidad de la Ciudad Jardín les solucionara la ausencia de suministros básicos.
A raíz de ello, se suspendió el evento y se llevó a cabo este domingo, donde la Reina de Viña 2017 lució una versión más sobria de su look original. Con plumas y un bikini negro apareció en la piscina del Hotel O’Higgins, algo completamente distinto a lo que se había anunciado anteriormente, en el que el dorado primaría.
Según explicó después la abanderada de Canal 13, decidió hacer algo más sobrio para solidarizar por los afectados por los aluviones en San José de Maipo.
Pero según reveló Las Últimas Noticias, la idea era transformarse en un leopardo. El tatuador Marlon Parra, el concepto era «muy sobrio, porque ella nunca estuvo dispuesta a hacer algo como los desnudos que habían trabajando antes».
Así era como luciría en un principio Kika Silva, según dio a conocer el matutino:
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