En el estudio de su late «Más Vale Tarde» el animador fue aprisionado por un larga cuerda que pasó por diversas partes de su cuerpo, luego debió arrodillarse, recibir un par de cachetadas, y finalmente sentir espermas de vela en sus manos. La culpable fue Mistress Margot, una «dominatrix», cuyo oficio es otorgar placer a través del dolor a sus clientes, a quienes denomina «sumisos». El tema se convirtió rápidamente en trending topic con el hashtag #SoyDominatrix , reflejando el impacto que causó este show nunca antes visto en la televisión chilena.
«Lo estamos haciendo para entender el oficio de ella, es un ejemplo muy básico pero casi real», argumentó Escobar para tan curioso momento, que lo dejó con una cara de temor que sólo se había visto en su faceta actoral.
La entrevista a Mistress Margot sigue la senda de la entrevista a Jose Carlo, el orgulloso prostituto gay que también fue tema obligado en las redes sociales y elevó el rating del espacio nocturno hace un par de semanas.