Desde el jueves 5 hasta el domingo 29 de octubre, se podrá disfrutar en el Teatro Nescafé de las Artes de «Provócame», obra teatral musical de Cultura Capital y la dupla de Los Contadores Auditores, inspirada en la música de Chayanne.
En conversación con nuestro sitio, Montserrat Ballarin que forma parte del elenco de la obra centrada en el repertorio del astro latino, nos contó que la historia se trata de «tres científicos que viajan en el tiempo y llegan a un lugar que se llama Nueva Aurora, un espacio perdido en el tiempo donde vive una comunidad de mujeres que no conocen a Chayanne».
«A medida que empiezan a revelarles este mundo nuevo, las reglas del lugar cambian y las mujeres empiezan a empoderarse, a descubrir cosas», detalló la actriz, revelando además que «mi personaje se llama Salomé, la loca del pueblo. Es bien curiosa, siempre está queriendo saber más, duda de todo, es la única que sabe leer y se atreve a usar pantalones en lugar de falda, entonces es un poco ninguneada por el resto de las mujeres. Además, ella está muy curiosa con la llegada de los científicos, porque cree que traen conocimientos que pueden ser beneficiosos para la comunidad, y va a ser la más entusiasmada porque estos científicos se queden para saber cosas nuevas y saber más de Chayanne».
Otra conocida integrante del elenco, que también conversó con Fotech.cl, es Francisca Imboden. «Mi personaje es Rebeca, la primera mujer de un líder espiritual que se llama Jacobo, patriarca de una secta, por decirlo de alguna forma, tipo el gurú de Chimbarongo. Somos parte de un grupo humano que no conoce a Chayanne y que no conoce miles de cosas. Por otro lado, están los científicos que inventan una máquina muy especial que los lleva a este pueblo donde no conocen a Chayanne, pero ellos son fanáticos, entonces esa música empieza a abrir muchas puertas, muchos secretos y mundos internos muy curiosos, un cambio radical en esta comunidad», relató.
Coreografías al ritmo de Chayanne
Junto con afirmar que «Próvocame» ha sido la obra quizás «más desafiante a nivel de coreografías», Monserrat Ballarin explicó que «necesitas de mucho en lo actoral, de construir estos personajes que son dibujados como con plumón, con unos vestuarios muy al chancho y con un repertorio que si bien no es tan difícil como Luis Miguel, sigue teniendo sus complejidades y el desafío ha estado ahí. Encontrar el virtuosismo de la danza, sin perder de vista la comedia, la historia que estamos contando, que la gente se ría y que no aparezca el nervio del actor intentando hacer la peripecia bien. Nos tocó bastante exigencia física, pero eso siempre es entretenido».
Francisca Imboden, por su parte, contó que ella viene de haber participado en «el musical de Luis Miguel, así que ya estoy entendiendo las posibilidades. Es súper distinto, pero también muy interesante poder hacer obras que jueguen con una musicalidad súper clara, pero fantaseen sobre cómo instalar a este ídolo con su música en un contexto totalmente loco y volado. Súper entretenido y mágico».
«Yo soy totalmente de Chayanne», aseguró la actriz respecto a su historia personal con el cantante. «No me gustaba cuando era lola, porque encontraba que era demasiado romántico hasta que lo vi, porque me colé en un ensayo que él estaba haciendo para ‘Martes 13’ cuando yo hacía ‘Teleduc’ en Canal 13. Casi me morí, nunca había visto algo tan bello, simpático, talentoso y amoroso con su equipo, les sacaba el trote porque les decía ‘¿qué sugieres tú?, hagamos lo que dice ella’. De ahí para adelante, mi amor por él fue totalmente incondicional. Toda la vida me ha encantado Chayanne, lo canto en karaokes, mi hijas lo aman, cuando viene Chayanne vamos y gritamos, porque no sabemos todas las canciones», comentó con entusiasmo.
Ballarin, contrario a Imboden, reconoció que «yo la verdad es que no conocía mucho la música de Chayanne, mi mamá lo escuchaba pero para mí ha sido un descubrimiento, tanto el repertorio como también la historia que está muy entretenida».
«La invitación es a reírse, a pasar un buen rato, esta obra es una explosión de energía. También la invitación es a sumergirse en el universo de Chayanne. Él es un gran bailarín», manifestó la intérprete de Romina en «Como La Vida Misma». «Pura buena vibra, buena onda, que la gente vaya a reírse, a gozar, a ver una historia entretenida y escuchar todas las canciones que son los emblemas de Chayanne, y que tienen una trayectoria súper larga, desde los primeros hits a los más nuevos», remató.
Para finalizar, la actriz que da vida a La Turca en «Generación 98», motivó al público al señalar que «estas obras son como antidepresivos teatrales. Un momento de felicidad que tiene mucho de concierto, donde se puede corear, cantar, disfrutar y bailar, una fiesta donde hay que entregarse a la locura del humor deschavetado y ser poco realistas, pero muy entusiastas. No hay que buscar realismo en esto, pero sí felicidad y diversión. Dejarse llevar por la fantasía, reírse harto, cantar fuerte y entrar en este mundo raro y curioso. Ojalá les guste lo que hacemos».