El litigante, que se encuentra a cargo del caso del camarógrafo de «Mucho Gusto» que se vio afectado por un corte de pelo realizado en contra de su voluntad, habló directamente de la actitud del canal privado en el polémico caso.
En primera instancia, Roberto Ávila, abogado que patrocina a José Miranda en su demanda en contra de José Miguel Viñuela, reveló las contradicciones que expone la defensa del conductor: «Se transforman en una contradicción insalvable: reconocen el hecho, reconocen que fue grave, que fue un exceso desmedido y, sin embargo, piden rechazar la demanda. Es un comportamiento contradictorio, porque públicamente piden disculpas, pero en el expediente, con la máxima vehemencia, piden eludir su responsabilidad».
Por otro lado, el profesional se refirió al depósito de 350 mil pesos que usaron los abogados de Viñuela para demostrar acuerdo: «Un acto que nosotros entendemos de mala fe, pues se depositó esa cantidad de dinero, lo vino a saber mi representado después, cuando revisó su cuenta, sin consentimiento ni conocimiento de él”. En ese sentido, aseguró que “ahí no hay ningún acuerdo previo que posibilite ese depósito de dinero, esa insignificante cantidad. Él (Viñuela) la hizo con el evidente propósito de erosionar responsabilidades futuras. No hay un acuerdo previo que se ejecute con ese depósito minúsculo».
Por otro lado, Ávila se refirió al regreso del comunicador a «Mucho Gusto»: «Yo no puedo plantear que una persona no tenga derecho a trabajar, pero evidentemente quien ha cometido un estropicio de esta magnitud debería ver reflejado el malestar de su empleador en su exposición mediática y eso no ocurre, lo vuelven a poner ahí».
«Mega se hace solidario con el hecho (…) Vamos a tomar alguna decisión porque hay una responsabilidad del canal. Si ellos actúan como si nada, vamos a tomar una decisión en su momento», finalizó.