La tercera temporada del programa de cocina de Chilevisión se encuentra en su recta final, pues los participantes ya no trabajan en equipo y corren por cuenta propia.
Este jueves en «El Discípulo del Chef», se vivió una particular situación protagonizada por Vanesa Borghi y Marlen Olivari. Los concursantes debieron preparar un plato con temática «de contrastes» para ganar la prueba de inmunidad, hazaña que los propios chefs calificaron como «la más compleja que han enfrentado».
“Voy a llegar y va a salir increíble. Les va a encantar, voy a ganar y todos felices. Hay que pensar en positivo, siempre en positivo”, dijo la modelo argentina a las cámaras. Resulta que Olivari, al estar cerca, escuchó y posteriormente disparó con un peculiar comentario.
“Uno puede tener mucha confianza, pero nunca hay que ser soberbio. A veces eso cae mal a las personas. Creo que uno tiene que ser súper humilde y tratar de dar lo mejor de uno, pero siempre con los pies en la tierra”, sostuvo.
A continuación se muestra que, en conversación con la producción, la ex «Morandé con Compañía» ahondó más en el tema. «Perro que ladra no muerte. Hay gente que habla mucho. A veces hay personas en el mundo que hablan mucho, que se dice ganador o ganadora, y a mí eso me carga, porque te puedes pegar un tremendo costalazo”, afirmó.
Si bien no habló directamente de Borghi, la edición y el contexto dejaron en claro que Marlen se refirió a los confianzudos dichos de la trasandina.
Cabe destacar que la prueba de inmunidad la ganó Karen Bejarano con una excelente evaluación por parte de Ennio Carota, Sergi Arola y Carolina Bazán.
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