Se han transformado en verdaderos “rockstars” de la economía. Su cotización mediática ha subido con la misma velocidad con que han bajado las acciones de La Polar. Son los hermanos Franco y Antonino Parisi, que han logrado gran notoriedad analizando la contingencia financiera de manera didáctica y entretenida en diversos programas de TV, consiguiendo una figuración mediática que sería la envidia de cualquier estrellita de farándula.
Estos dos personajes ya tenían desde hace mucho tiempo un prestigio muy bien ganado en el mundo académico y en el periodismo económico, que lee sus columnas en el diario “Estrategia”, los escucha en el interesante programa “Buenos Días Mercado” en la Radio El Conquistador (en el cual trabajan con el analista internacional Libardo Buitrago y la periodista Claudia Kelly), y los ve en sus frecuentes apariciones en noticiarios y programas de actualidad. Sin embargo, desde que se destapó el escándalo de La Polar, han logrado notoriedad más allá de estos círculos. Primero aparecieron en “Morandé con Compañía” (¡¡!!) explicando la crisis “con manzanitas”. Posteriormente, tuvieron una memorable entrevista con Julio César Rodríguez a su late show “Síganme los Buenos”, en la cual hablaron a sus anchas de temas como la tasa máxima convencional y las energías renovables (Antonino tiene emprendimientos con paneles solares). Fue tan buena, que se ganaron una sección estable llamada “El café de los Parisi”. Además, en la última semana de julio empezaron con un programa de media hora (que se hace cortísima) en Vía X llamado “Los Parisi: el poder de la gente”, junto con Claudia Kelly. Y, para más remate, Franco Parisi es serio candidato para reemplazar a Juan Carlos Eichholz como panelista de “Tolerancia Cero”
Los Parisi son dueños de un curriculum tan amplio como intimidante: ingenieros comerciales, doctores en economía y finanzas, y académicos de la U de Chile, UNAB y UDLA, hasta con decanatos a su haber. Es decir, son expertos más que calificados (y apasionados por la economía), y saben de lo que están hablando. Además, llama la atención la manera didáctica y entretenida en que explican la actualidad económica, sin atisbos de ese lenguaje críptico tan propio de los economistas, dando consejos prácticos y aplicables, educando a la población en temas financieros (lo que se agradece enormemente), y con un estilo cercano, simpático y hasta campechano (en especial Antonino). Finalmente, resulta destacable la apertura mental y capacidad de diálogo de la que hacen gala, a años luz del fundamentalismo casi talibán que suele caracterizar a muchos expertos en economía, para los cuales el modelo capitalista parece ser poco menos que un dogma religioso.
Aparecieron en el momento preciso. En medio de un escándalo que ha provocado un severo cuestionamiento del modelo económico chileno, han logrado darle sustento y consistencia a las dudas de la ciudadanía. Si estas cosas las dijeran economistas declaradamente antisistema como Marcel Claude, Manuel Riesco o Hugo Fazio, claramente no tendrían ningún impacto en el mercado, por un tema de prejuicios ideológicos. Sin embargo, que lo digan dos expertos reconocidos e influyentes, ideológicamente cercanos a la derecha, partidarios declarados del modelo capitalista pero con una postura crítica respecto de él, que escriben en diarios financieros, hablan en una radio ABC1, enseñan en universidades privadas y aparecen en televisión le da un peso e influencia especial. De hecho, después de su aparición en MCC, lograron que algunos bancos bajaran las tasas.
Como era de esperarse, algunos ya han resentido su postura crítica y asertiva. Ya el economista José Ramón Valente acusó a Franco Parisi de “sembrar el odio de clases” (¿?). No sería extraño que otros empezaran a expresar su molestia, pues están pisando muchos callos, y muy fuerte.
Los Parisi son a la economía y las finanzas lo que Federico Sánchez es a la arquitectura y el diseño. Hacen ver útil, comprensible, interesante y entretenido lo que para muchos resulta árido, enredado y (para los que tuvimos la mala suerte de tener un pésimo profesor de economía) desagradable. Están haciendo un aporte invaluable, no solamente a la opinión pública, sino que al medio televisivo, demostrando que se puede hablar de temas serios y relevantes de manera entretenida y didáctica.