Atacama Large Millimeter Array, más conocido como ALMA, es el radiotelescopio más potente del mundo y está ubicado en el norte de Chile, el mismo que debió detener sus observaciones del universo y cerrar sus puertas debido a la pandemia mundial por Covid-19. Un desafío tecnológico y humano sin precedentes para el que nadie estaba preparado.
Esta noche, a las 22:30 horas en 13C, se podrá ver a cerca de 30 integrantes de ALMA, desde el director hasta asistentes y técnicos, operadores de antenas, miembros del equipo de seguridad, astrónomos y muchos otros colaboradores que dieron sus testimonios de cómo vivieron este cierre histórico debido a la crisis sanitaria. Juntos van dando forma a la historia de este año inesperado y explican cómo se llegó a tomar la decisión de detener esa enorme maquinaria por primera vez en su corta existencia (fue inaugurado en 2013), cómo se vació la mini-ciudadela que constituye el campamento de ALMA a casi 3.000 metros de altitud y cómo se cuidaron sus instalaciones en ausencia de su personal, que ya no contaba ni con energía ni agua.
“Cerrar ALMA fue una decisión sin precedentes en la historia del observatorio, pero absolutamente necesaria para garantizar la seguridad y el bienestar de todos en un momento en el que sabíamos tan poco sobre la naturaleza de la pandemia. Se desconocía cuándo y cómo íbamos a poder reabrir. Este documental muestra la extraordinaria historia de volver a poner en funcionamiento ALMA, el observatorio más grande del mundo. Un gran esfuerzo que involucró a todos los miembros del personal para que esto suceda, de modo que hoy volvemos a poder entregar datos de alta calidad y emocionantes nuevos descubrimientos científicos a la comunidad”, señala Sean Dougherty, director de ALMA.
Por otro lado, el director del documental, Alejandro Carrasco, da a conocer que fue un desafío difícil y muy emocionante grabar el documental en el radiotelescopio más potente del mundo, sobre todo considerando que tuvieron que subir a 5.000 metros de altitud, donde se encontraron con grandes antenas que lo hacían transportarse como a otro planeta. “Estar ahí junto a las 66 antenas, sabiendo que no existe otro observatorio igual en otro lugar del planeta, es una sensación muy especial. Habíamos hecho otros documentales científicos, pero con esta características de pandemia y en un lugar a gran altura lo hizo muy difícil. Sin embargo, creo que se logra transmitir esa sensación de incertidumbre que se vivió en los momentos más difíciles de la crisis sanitaria”, cuenta el realizador.
“Las emociones que están involucradas en todo este proceso son muy especiales. Aquí trabajan personas de diferentes nacionalidades: chilenos, europeos, estadounidenses y japoneses. Quisimos transmitir la sensación de los trabajadores de ALMA al dejar sus puestos de trabajo y partir a sus casas. ¿Qué vivieron y sintieron? ¿Cómo era la logística para abandonar las instalaciones? Y otra cosa que logramos captar es el compromiso de toda la gente de ALMA en volver a echar a andar el observatorio, notas la dedicación y cariño que tienen por lograr desentrañar los misterios y orígenes del universo”, destaca el productor ejecutivo de la producción, Vicente Carrasco.
En octubre de 2020 y gracias a la mejora en los indicadores de la pandemia de Covid-19 en Chile, se tomó la decisión de comenzar el encendido y repoblamiento de los centros de operaciones, una medida nada fácil si se toma en cuenta que en tiempos normales 150 colaboradores, más unos 50 contratistas, trabajan en las instalaciones del observatorio, ubicado a 50 kilómetros de San Pedro de Atacama.
Hubo que generar muchos protocolos de seguridad para evitar la detección de contagiados en el lugar de trabajo, medidas que han demostrado ser eficaces, pues, hasta hoy, no se han registrado casos.
Hacer partir las turbinas de gas que energizan a ALMA y revisar el estado en que se encontraba cada una de las 66 antenas que escudriñan el universo, ubicadas a 5.000 metros de altitud, fueron, sin duda, algunas de las pruebas más duras de sortear. Pero los colaboradores del mayor proyecto astronómico del mundo demostraron que pese a las adversidades vividas en los últimos meses, seguirán trabajando con la misma devoción en la búsqueda de los orígenes cósmicos.
Una vez estrenado el documental por las pantallas de la señal cultural del 13, a través de las redes sociales de ALMA se realizará una mesa redonda con el objetivo de compartir con algunos de los participantes del documental, quienes responderán las principales inquietudes del público.